El insoportable goteo
En estos tiempos confusos, el goteo noticiable de corruptos se nos hace insoportable.
Padecimos la burbuja inmobiliaria, sufrimos la crisis financiera, nos acosa la Banca con hipotecas abusivas y sus desahucios, debemos todos el dinero inimaginado para pagarles su nefasta gestión bancaria y el masivo engaño con la adjudicación de Preferentes hasta a enfermos de Alzheimer, los gobernantes nos han engañado y aprovechan el momento para desmantelar nuestro Bienestar, los políticos no acaban de bajar a la calle, los periodistas se frotan las manos con las audiencias y agitan nuestras convicciones, los Jueces aplicaron las Leyes en favor de los poderosos hasta que les aplicaron los recortes y se colocaron a nuestro lado, las Policías se debaten entre cumplir las órdenes o defendernos, en fin…
Mientras todo sucede al ritmo impuesto por la impresentable Troika, los Corruptos han ido apareciendo del mismo modo que los deshielos glaciares dejan al descubierto huesos, vestidos y utensilios de nuestros ancestros.
Todos estos indeseables llevan años vaciando nuestras Arcas y , defendidos por abogados y legislaciones que consiguen alargar los Procesos hasta dejarlos fuera de las merecidas penas carcelarias y de las otras, consiguen pasar a un cierto olvido social.
Ellos ya saben que no cabe otra cosa que «aguantar el chaparrón».
Soportando los focos mediáticos van haciendo sus inciertas vidas hasta que llegue algo más interesante o importante y les desenfoque.
Quizás alguno deba cumplir parte de su condena,nunca «firme», hasta ese día que llegar… llegará como les consuelan sus Abogados. El dinero robado y a salvo de las garras del Fisco les devolverá a su vida y status.
Nosotros, ocupados con nuestros problemas, dejaremos de percibir lo insoportable del goteo porque se hará cotidiano.
Claro, que de vez en cuando no querremos adaptarnos a sus noticiables corrupciones y se nos ocurrirá echarles. Cuando suceda deberemos oír que somos una Turba violenta y encarcelable…
Amparo para más escarnio a lo que yo denomino Pesticia, acaba de demostrar que como es primavera, el ínclito Camps se vaya de ‘rositas’, pues el Supremo así lo ha decidido. Asco.